Moscú, 21 de noviembre, RIA Novosti. La oficina de Amnistía Internacional (AI) en Irak ha demandado del Gobierno de este país que saque a la luz pública los resultados de la investigación abierta a raíz de la práctica de torturas en Al-Jadriya, una cárcel secreta que el Ministerio del Interior iraquí tenía instalada en el barrio homónimo de Bagdad.
‘Ha transcurrido un año desde la apertura del sumario sin que las autoridades hayan proporcionado información alguna sobre su avance' - constata la AI, exigiendo al primer ministro iraquí, Nuri Al-Maliki, que dé a conocer el resultado de la investigación y garantice que los culpables serán sancionados de acuerdo con el Derecho Internacional.
Según los datos de la AI, en la cárcel de Al-Jadriya se encontraban 168 reclusos, entre ellos, algunos niños. La mayoría de los presos retenidos en Al-Jadriya eran sunnitas. El Gobierno formó una comisión especial para esclarecer el caso pero los líderes de la comunidad sunnita exigieron una investigación imparcial con participación de expertos internacionales, en particular, los de la AI.
