Moscú, 3 de noviembre, RIA Novosti. La intoxicación por el consumo de bebidas alcohólicas provoca actualmente en Rusia dos veces más víctimas que en 1985, según manifestó a la prensa un alto funcionario de la Cámara nacional de Comercio e Industrias.
Hace dos décadas, según él, se consumían en Rusia 50 litros de vodka por cada cien litros de vino. Hoy en día, el consumo del vodka supera al del vino en un 50%.
La bajada del nivel de vida en los últimos quince años también influye en esta situación. Un 35% de la población rusa se vio por debajo del umbral de la pobreza. El salario medio, que en 1985 alcanzaba para adquirir 37 botellas de vodka, ahora da para 23. Como consecuencia, un 8 por 100 de los rusos compra toda clase de bebidas sucedáneas que tienen alcohol y cuestan del orden de 15 rublos por un litro, mientras que una botella de vodka legal, de medio litro, vale por lo menos 65 rublos.
El segmento del vodka legal representa un 52% del mercado; el vodka producido ilegalmente, un 17%; otro 12% corresponde al producto semilegal, fabricado en las horas extra; las bebidas hechas a partir del alcohol tienen una cuota del 10%; el vodka adulterado, un 3%; y las infusiones de farmacia, un 5%.
