GUDOK. La empresa aeronáutica rusa VASO dejará de producir los aviones Iliushin-96 de la serie trescientos, cuyas ventas han caído de forma drástica últimamente, y se va a centrar en la nueva modalidad Iliushin-96-400 destinada para las rutas de larga distancia, sobre todo, en su versión de carga.
El precio de esta nave será un 10% superior al del modelo 300, y todos los equipos aviónicos, igual que los turborreactores, serán de producción rusa.
Con una carga máxima de 92 toneladas, el Iliushin-96-400 tendrá una autonomía de vuelo de 5.100 Km.; con 40 toneladas, podrá volar a 13.200 Km. sin hacer escala. La nave será 9,5 metros más larga que la versión anterior, por lo cual su capacidad se eleva de 300 a 436 personas.
En opinión de expertos, la mayor ventaja del nuevo avión es que reduce el gasto de combustible. El 300 fue desarrollado hace dos décadas, cuando nadie se preocupaba por la austeridad energética, de manera que ya es un modelo obsoleto.
La planta VASO ya tiene pedidos para 20 máquinas y está negociando la venta de este avión a Siria, Zimbabwe, Irán y China. Algunas compañías aéreas de Rusia también han manifestado su interés por el proyecto: Atlant-Soyuz, por ejemplo, ha solicitado dos modalidades de carga que se pondrán en explotación a mediados del próximo año.
Aeroflot mantiene una postura más cautelosa y no ha decidido aún se hará el pedido. En la actualidad, esta compañía tiene en su flota seis Iliushin-96-300 más un contrato para el suministro de otros tantos.
Con todo, los expertos le auguran al Iliushin-96-400 un gran futuro, especialmente, a la luz de los actuales precios del petróleo.
