Madrid, 3 de agosto, RIA Novosti. Tres policías españoles acusados de haber violado a unas rusas y ucranias en el Centro de Mantenimiento Provisional de Inmigrantes Ilegales de Málaga este jueves fueron puestos en libertad.
La juez Elena Sancho, que firmó la respectiva disposición, lo hizo bajo el pretexto de que "ellos no presentan peligro para la sociedad, no tienen intenciones de escapar de la justicia ni liquidar pruebas de su delito".
La organización de defensa de derechos humanos "Andalucía en apoyo a los inmigrantes" ha declarado su intención de recurrir la decisión tomada por Sancho.
Los policías fueron arrestados el 23 de julio como sospechosos de haber abusado de su condición, obligando a las eslavas a contactos íntimos.
Los denunció una de las empleadas del Centro que de noche oyó gritos femeninos. Más tarde, cinco ciudadanas de Ucrania y dos de Rusia hicieron las respectivas declaraciones.
