"A lo largo de la noche [del 6 al 7 de marzo] fueron frustrados los intentos del régimen de Kiev de lanzar ataques terroristas con aviones no tripulados contra instalaciones en el territorio de Rusia. Las defensas aéreas interceptaron un dron ucraniano sobre la región de Kursk; otros cinco fueron destruidos en las regiones de Briansk (3 drones) y Tula (2 drones)", dice el comunicado oficial.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 la operación militar especial con el objetivo de defender las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, frente al genocidio cometido por parte de Kiev, y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.
Las regiones rusas limítrofes con Ucrania, como Bélgorod, Briansk, Kursk y Vorónezh, denuncian regularmente impactos de proyectiles, incursiones de drones y otros ataques desde el otro lado de la frontera, que obligan a la población a buscar refugio en otros lugares.