La Epifanía, junto con la Pascua, es una de las fiestas cristianas más antiguas.
En la foto: baños bautismales en el estanque del Gran Palacio en Ostánkino, Moscú.
Esta fiesta se asocia con el bautismo de Jesucristo por Juan el Bautista en el río Jordán.
En la imagen: baño bautismal en el monasterio de Spaso-Yákovlevski Dimítriyev, en la ciudad rusa de Rostov Veliki.
La ortodoxia rusa celebra la Epifanía en una fecha fija: el 19 de enero.
En la foto: un socorrista durante el baño bautismal en el puerto Sportívnaya de la ciudad de Vladivostok.
La Epifanía es una de las doce fiestas más importantes del cristianismo.
En la foto: un clérigo realiza el rito de consagrar el agua en la festividad de la Epifanía en la ciudad rusa de Vladivostok.
Durante el bautismo de Cristo, el Espíritu Santo descendió del cielo en forma de paloma, y una voz desde lo alto llamó al Hijo Jesús.
En la foto: consagración del pozo de hielo durante la celebración de la Epifanía en los estanques Borísovskiye de Moscú.
La Epifanía se celebra ampliamente en Rusia. En todo el país se organizan oficios religiosos y baños bautismales en pozos de hielo.
En la foto: baño bautismal en la bahía de Amur, en Vladivostok.
Existe la creencia de que el baño bautismal purifica el alma y el cuerpo. Sin embargo, esta tradición no es canónica, aunque la Iglesia la acoge con satisfacción.
En la foto: una participante del baño bautismal en el lago Shartash de la ciudad de Ekaterimburgo.
Lo más importante para los cristianos ortodoxos en la Epifanía, es asistir a un oficio religioso, confesarse, comulgar y tomar agua bendita.
En la foto: baño bautismal en un estanque de Ekaterimburgo.
La principal tradición de la fiesta de la Epifanía es la consagración del agua, que tiene lugar en las iglesias y en los cuerpos de agua. Esto se hace tanto el día de la Epifanía como en la víspera de la Epifanía, el 18 de enero.
En la foto: un sacerdote durante un baño bautismal en el estanque del Gran Palacio de Ostánkino, Moscú.
Baños de Epifanía en el lago Shartash, Ekaterimburgo.
El agua de la Epifanía se llama agua bendita y se considera una reliquia sagrada capaz de curar el alma y el cuerpo.
Foto: Baño bautismal en la aldea de Bolshaya Murta, en la región de Krasnoyarsk.
El agua bendita puede utilizarse durante todo el año.
En la foto: un clérigo consagra un pozo de hielo durante las celebraciones de la Epifanía en el monasterio Spaso-Yákovlevski Dimítriyev de Rostov Veliki.