En sus redes sociales, la OCI tildó ese ataque de "amoral", "ilegal" y "acto de chantaje político".
Para la OCI, "el discurso del secretario general ante el Consejo de Seguridad ha estado en línea con sus deberes y responsabilidades derivados del derecho internacional, el derecho internacional humanitario, así como de la Carta y las resoluciones de las Naciones Unidas".
El organismo reiteró su "profundo respeto" a Guterres "por el papel de las agencias de las Naciones Unidas y sus incansables esfuerzos a todos los niveles para detener los crímenes de guerra perpetrados por la ocupación israelí contra el pueblo palestino, su tierra y sus lugares sagrados".
El 24 de octubre, el embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, acusó al secretario general António Guterres de justificar el terrorismo con su declaración sobre el origen de la actual escalada del conflicto palestino-israelí. Erdan dijo además que Israel denegaría el visado al secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths.
Guterres rechazó de plano la acusación israelí y lamentó que sus palabras, de que el reciente ataque de Hamás no ha surgido de la nada, hayan sido sacadas de contexto y malinterpretadas.