Las razonables dudas del electorado parecieran haber encontrado eco durante la ronda de coloquios del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA), que tuvo lugar entre el 4 y el 6 de octubre.
IDEA es una organización que nuclea a más de 500 compañías locales y que
se considera como "el espacio más importante de representación y encuentro del empresariado argentino".
Según la prensa local, el 5 de octubre
no se le permitió cerrar el simposio del organismo al candidato oficialista de Unión por la Patria, el ministro de Economía,
Sergio Massa, y quien clausuró la jornada ante los empresarios fue la candidata de Juntos por el Cambio,
Patricia Bullrich.Pero el "temor" estaba instalado en la "contracumbre" que organizó Javier Milei, candidato de La Libertad Avanza y quien expuso casi a la misma hora que Bullrich.
De acuerdo al experto, desde el sector empresarial "siempre apoyan a todos los candidatos, a cada candidato le piden algo distinto. Pero el buen empresario hasta pone plata en todas las campañas, lo que después se retribuye de alguna manera".
Por su parte, también en diálogo con Sputnik, el politólogo Julio Burdman consideró que el empresariado
"está un poco perdido en esta elección".
A ojos del politólogo, la principal duda es dónde están ubicados los grandes grupos de empresarios nacionales, "que son los que están más expuestos", y que en general "los identificamos como los sectores agrupados en la Asociación Empresaria Argentina (AEA)", donde está el Grupo Clarín-Personal (comunicación), el Grupo Techint (ingeniería y construcción), a Arcor (alimentos y agroindustria), entre otros.
"Las grandes empresas, que tienen más compromiso con la situación argentina porque tienen grandes inversiones puestas en el país y sus intereses son muy especiales, porque siempre son las que apuestan políticamente", agregó.
Dvoskin concuerda con Burdman respecto a las distintas identificaciones político-sectoriales, al sostener que el apoyo para tal o cual candidatura "hoy en día no queda muy claro", y aseveró que, a pesar del apoyo ciudadano expresado en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), del 13 de agosto,
Milei "no es el candidato de ningún sector del poder".
"No hay ningún sector económico importante que haya manifestado el apoyo a Milei ni que lo exprese, porque hoy en día la propuesta de dolarización es mucho menos posible que la que tenía [Carlos Saúl] Menem (1989-1999) en 1999", enfatizó el economista.
El candidato libertario irrumpió con el 29,86% de las PASO y puso sobre la mesa medidas económicas incendiarias para el control inflacionario y la liberalización económica, tales como la dolarización de la economía y la abolición del Banco Central, sindicado por el candidato libertario como la causante de la crisis de inflación que vive Argentina.
De acuerdo con el economista entrevistado, previo a las PASO, Milei "no medía alto en ningún lado".
"Creo que, en líneas generales, los empresarios como personas seguramente la mayoría voten a Bullrich, por sus propias experiencias de clases y sus espacios de socialización. La mayoría del empresariado se identifica con el macrismo,
pero entre Milei y Massa van a terminar eligiendo a Massa", concluyó el economista.