En el Palacio de Constanino, en Strelna, ambos presidentes trataron los temas de actualidad relacionados con el desarrollo de la asociación y alianza estratégica entre Moscú y Minsk, así como los procesos de integración en el marco del llamado Estado de la Unión.
El Estado de la Unión de Rusia y Bielorrusia es una entidad supranacional, fundada en 1999, que tiene como objetivo formar gradualmente un único espacio político, económico, aduanero y humanitario entre las dos naciones. También pretende mejorar el bienestar y los estándares de la vida de los habitantes de Rusia y Bielorrusia, fortaleciendo la amistad y el desarrollo pacífico y democrático.
Durante el encuentro, el mandatario ruso destacó una
cifra récord de vehículos extranjeros que
fueron destruidos en las últimas 24 horas durante la operación militar especial rusa.
"Probablemente, no hemos destruido tantos [vehículos] extranjeros en un solo día", destacó Vladímir Putin.
Las palabras del presidente ruso llegan después de que Alexandr Lukashenko estimó que, según sus datos, más de 15 Leopard y más de 20 Bradley fueron destruidos en una sola batalla.
En cuanto a las bajas por parte de Ucrania, Putin aclaró que desde el comienzo del intento de contraofensiva ya han superado las 26.000 personas.
El mandatario ruso también señaló que los mercenarios extranjeros en Ucrania
están sufriendo cuantiosas pérdidas.
Ambos mandatarios además se mostraron muy escépticos sobre la contraofensiva del Ejército ucraniano.
"No hay una contraofensiva", opinó el presidente bielorruso, a lo que su anfitrión replicó: "Sí que la hay, pero ha fracasado".
El mandatario de Bielorrusia declaró que está dispuesto a acudir en ayuda de los habitantes del oeste de Ucrania ante un eventual traspaso de sus territorios a la vecina Polonia.
Al reunirse el 23 de julio con los miembros permanentes de su Gabinete de seguridad, Putin afirmó que Polonia fue abandonada en 1939 por sus aliados occidentales a la merced de la maquinaria bélica de Alemania y recuperó la soberanía en gran medida gracias a la Unión Soviética. En la misma reunión, Putin alertó de que los
planes de Polonia, Lituania y Ucrania de formar una unidad militar regular conjunta persiguen en el fondo la ocupación posterior de los territorios del oeste de Ucrania.