"Luego de los avatares, de las agresiones imperiales, luego de 900 sanciones, aquí está Venezuela, tendiéndole la mano a Irán, lista para seguir contribuyendo a la construcción de un mundo nuevo", dijo el presidente venezolano, Nicolás Maduro, durante la firma de los acuerdos bilaterales.
Raisi, en tanto, celebró el acercamiento de su país con Venezuela, con quien, dijo, comparte visiones, intereses y enemigos.
Según el presidente de Irán, el comercio pasó de 600 millones de dólares hace dos años a 3.000 millones de dólares en la actualidad y que el objetivo en una primera fase es llegar a los 10.000 millones de dólares y a los 20.000 millones de dólares en una segunda fase.
Los acuerdos entre ambos países abarcan varias áreas. Entre otros, se pactó la construcción de una naviera binacional que, según Maduro, permitirá a ambas naciones llegar a la meta de un comercio de 20.000 millones de dólares. También hablaron sobre la creación de un centro de innovación y tecnología. Otro acuerdo incluye un plan para exportar 10.000 toneladas de carne bovina congelada de Venezuela a Irán.
También se firmaron acuerdos en materia de minería —área donde se pactó diseñar una agenda de trabajo común— de educación, de intercambio cultural, de salud y de seguros.
Maduro, quien condecoró a Raisi con la Orden de Libertadores de Venezuela, dijo que Irán es una potencia mundial en ciencia y tecnología, que se ha convertido en una referencia para todos los países que luchan por la independencia, la justicia, la igualdad y por una humanidad "verdaderamente humana".
En su discurso tras la firma de los acuerdos, Maduro calificó como
"un crimen de lesa humanidad" las acciones impulsadas por Washington contra su país, al referirse a las recientes declaraciones del
expresidente Donald Trump."Cuando me fui, Venezuela estaba a punto de colapsar, nos habríamos apoderado de ella y habríamos conseguido todo ese petróleo, pero ahora se lo compramos a Venezuela, haciendo rico a un dictador", dijo Trump el pasado 10 de junio.
En ese sentido, Maduro aseguró que el objetivo de Washington ha sido apoderarse de las riquezas de Venezuela, lo que consideró como un robo.