Los hallazgos relacionados con las habilidades cinéticas de los ofidios amplían nuestros conocimientos sobre estos tipos de animales, que aunque son vertebrados —por su estructura alargada como una cuerda— son altamente flexibles.
Las serpiente caña enana –Pseudorabdion longiceps–, aparentemente tiene una forma única para huir en caso de encontrarse en peligro de potenciales cazadores. El reptil originario del sur de Asia es capaz de hacer volteretas que aceleran su fuga.
"Reportamos en detalle una observación de un nuevo comportamiento de escape empleado por esta especie: dar volteretas", escribió un equipo de investigadores dirigido por el biólogo Evan Seng Huat Quah de la Universiti Malaysia Sabah.
Las especies pequeñas de serpientes son especialmente vulnerables a depredadores. En el caso de la calamaria, estas dependen predominantemente de algunas características de su hábitat para camuflarse, como son la cripsis, los restos de suelo forestal o el mimetismo batesiano (dos o más especies similares en apariencia, pero solo una de ellas tiene mecanismos de defensa).
El nuevo registro es todo un acontecimiento científico, dado que antes se encontraban solo informes anecdóticos, por lo tanto, esta sería la primera vez que se sistematiza la información por medio de imágenes y descripciones detalladas.
La serpiente caña enana es un animal reservado y nocturno al que se le da muy bien esconderse. Además, el reptil, que tiene una mordedura a veces venenosa con un tamaño de 23 cm de longitud, es un refrigerio perfecto para los depredadores, entre ellos se incluyen pájaros y otras serpientes.
"Cuando se le acercó, la serpiente se sobresaltó y arrojó espirales a través de su cuerpo en forma de bucle y comenzó a rodar para tratar de escapar. La serpiente dio una voltereta a lo largo de aproximadamente 1,5 m en menos de cinco segundos por el camino. Al dar giros por una pendiente pudo ganar velocidad y cubrir rápidamente más terreno", describen los investigadores.
Serie de imágenes que muestran cómo la serpiente lanza sus espirales hacia adelante en un movimiento de voltereta
© Foto : Evan Quah
Para asegurarse de que no se trataba de un movimiento errático causado por el pánico, los investigadores colocaron a una de estas serpientes sobre un terreno sin inclinación varias veces y luego observaron cómo esta repetía este comportamiento una y otra vez. Mientras lo hacían, captaron en foto y video todo el proceso para poder determinar las etapas de este movimiento.
El movimiento comienza con la serpiente tirando de su cuerpo en forma de S, luego lanza la mitad frontal de su cuerpo al aire empujando su cola contra el suelo. Todo el cuerpo de la serpiente se eleva por el aire; cuando la cabeza toca el suelo, la cola se voltea hacia adelante, mientras que la cabeza y el cuello se enrollan para lanzarse de nuevo.
Después, se repite toda la maniobra. Básicamente, la serpiente lanza las espirales de su cuerpo una sobre otra repetidamente.
En el siguiente video, el cual fue capturado por los lugareños, es posible observar el comportamiento de la serpiente enana en acción.
Mientras otros animales simplemente se hace pequeños o revoltoso, y el entorno y la gravedad hacen el resto. La calamaria se destaca por su talento para rodar activamente, gastando energía para alejarse.
Por otra parte, las observaciones a estas especies continúan, por ejemplo, no hace mucho tiempo se registró a serpientes que usaban un método peculiar de "lazo" para trepar a los árboles, se informó en Science Alert.
La investigación fue publicada en la revista científica Biotropica.