"Por la mañana llegaron los estadounidenses a nuestra casa, mi madre y yo nos asustamos y bajamos al sótano. Entonces los soldados mataron a tres de nuestras vacas, persiguieron a mi madre y a nosotros, cinco niños, hasta el patio, le prendieron fuego a la casa y al granero. No nos mataron inmediatamente, sino que nos obligaron a volver al sótano y lanzaron granadas, lo que hizo que mi familia se hiciera pedazos", recordó uno de los testigos, Pham Thanh Cong.
"Los soldados masticaron un chicle y tranquilamente apretaron el gatillo, disparando a personas y animales", recordó el testigo.
"Llevaron a juicio al teniente [William] Calley, pero él solo era un pez pequeño. Toda la responsabilidad de esto no recae en Calley sino en los hombres que dirigieron la guerra", declaró el testigo.