"Como resultado de la guerra las pérdidas del sector ferroviario de Siria han superado los 1.000 millones de dólares", comunicó Al Araj a Sputnik.
Agregó que dada su importancia estratégica los ferrocarriles "se convirtieron en un blanco directo de los grupos terroristas armados que buscan desestabilizar la situación y dañar la economía nacional". Recordó que a causa de estos ataques fue destruida una parte significativa de la infraestructura ferroviaria, principalmente en las provincias del este, centro y sur del país.
El sector ferroviario también fue dañado por los devastadores terremotos del 6 de febrero, añadió. Las sanciones impuestas a Siria, continuó, impiden el suministro del equipo necesario para reconstruir el sector ferroviario.
"Esto nos obliga a buscar opciones de solución al problema en base a las oportunidades disponibles para recuperar paulatinamente este importante sector", indicó.
En este contexto, señaló que Siria debate con Rusia la posibilidad de cooperar para reconstruir y desarrollar el sector ferroviario sirio.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto, en el que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas. La solución del conflicto se busca en dos plataformas, la de Ginebra, bajo los auspicios de la Organización de las Naciones Unidas, y la de Astaná, copatrocinada por Rusia, Turquía e Irán.
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