"La fabricación en serie de los aviones Superjet New, MC-21, de otros aviones de fabricación nacional, por supuesto, causará una sustitución paulatina de los aviones de Occidente", afirmó Neradko.
Precisó que mientras tanto, las compañías aéreas rusas serán capaces de seguir explotando de manera segura los aviones de fabricación extranjera hasta 2030.
Rusia lanzó la operación militar especial en Ucrania en respuesta a la solicitud de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, para que se les preste ayuda frente al genocidio por parte de Kiev.
Numerosos países impusieron sanciones a Moscú. En particular, los países de Occidente prohibieron los suministros a Rusia de los aviones civiles y piezas de recambio y obligaron a las compañías de arrendamiento con opción de compra a romper los contratos con las aerolíneas rusas. Los servicios de soporte técnico y seguro de los aviones también se encontraron bajo las sanciones.
Además, la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá y varios otros países cerraron su espacio aéreo para los aviones rusos.