El agresor murió en un hospital de la ciudad sureña de Shiraz a causa de las heridas que sufrió durante su detención, comparten las agencias locales Fars y Tasnim. Las autoridades, no obstante, no han revelado detalles acerca del terrorista.
Las autoridades aseguran que el ataque fue perpetrado por un grupo wahabita, una derivación radical suní del islám. La agencia estatal de noticias iraní IRNA revela que los atacantes actuaron como "terroristas takfiri", una referencia a los extremistas sunitas del ISIS (autoproclamado Estado Islámico). Más tarde, desde el propio grupo extremista ISIS se atribuyeron el atentado del miércoles 26 de octubre en Shah Cheragh, en Shiraz, el segundo santuario chií más importante de Irán.
En el funeral por las víctimas del atentado en Shiraz, el jefe de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica, el general Hosein Salami, instó a los ciudadanos del país a dejar las discordias y unirse frente a las amenazas comunes que enfrentan.
"Les decimos a nuestros jóvenes, a la minoría que se ha dejado engañar, dejen de actuar con maldad. Esta ominosa sedición no les traerá ningún final feliz. ¡No arruinen su futuro!", reclamó.
La investigación sigue abierta, pero se sabe ya que el agresor llegó hasta la entrada del templo en un automóvil, salió del coche y abrió fuego con rifles de asalto Kalashnikov.
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