De acuerdo con Blanco, nadie se había atrevido a recrear esta imagen, la cual consiste en una representación de un cuerpo en calidad humana, "sin movimiento artístico", fruto de 15 años de estudios científicos. Lo que se refleja en los detalles del cuerpo, que evidencian la "brutalidad de la flagelación y de la crucifixión".
Blanco explicó que se acercó a la historia de la Síndone, como se le conoce a la Sábana Santa, buscando una explicación científica, "y quedé atrapado por su historia". Fue tal su compromiso con la recreación del cuerpo que, al colocarlo, se dio cuenta "que estaba ante la imagen que todos tenemos de Jesús de Nazaret.
Por esa razón, Blanco considera que la muestra es una ocasión de sentir y estar delante de la imagen "como jamás de ha hecho".
Para obtener las medidas del cuerpo, de 1,78 metros de altura, los artistas que trabajaron en la escultura hiperrealista se basaron en los puntos sangrantes de los pies, piernas o rodillas, entre otras. Fue así como se "ha reconstruido antropológicamente el cuerpo de Jesús, haciendo pruebas con volúmenes tridimensionales".
La exhibición está conformada por seis salas que combinan el formato tradicional expositivo con la tecnología, como video mapping y salas inmersivas. Se trata de un recorrido por la
historia de esta figura central del Cristianismo.
La primera sala se conforma de textos sobre la historia del personaje y de su rostro. La segunda da cuenta de la condena y muerte del predicador. Posteriormente aparece la Sábana Santa. Más adelante se incluyen antecedentes de la imagen de Jesús a través de la historia. Y, finalmente, la representación hiperrealista.