Un video grabado en el pueblo de Alchevsk, en la República Popular de Lugansk, muestra a unos bañistas al lado de un río cuando se les acercan dos helicópteros rusos Ka-52. Uno de ellos se queda suspendido sobre el agua, se pone de lado a los incrédulos espectadores y se acerca a ellos de manera lateral.
Luego, dirige su morro hacia las personas en la playa, pero sigue volando hacia atrás. En todo momento se encuentra literalmente rozando el agua y les echa unos buenos chorros a los bañistas. Dado lo impresionante que ha sido la demostración del dominio de estas máquinas, los espectadores no parecían estar enfadados con que se les mojara.