Bandera blanca
De acuerdo a datos oficiales del Ministerio de Defensa de Rusia, el 16 de mayo comenzaron a rendirse militares ucranianos y combatientes del batallón nacionalista Azov, en un total de 265, de los cuales, 51 se encuentran heridos de gravedad, quienes fueron trasladados a un hospital de la ciudad de Novoazovsk, en la República Popular de Donetsk.
En este sentido, la cartera castrense informó sobre un acuerdo con los militares ucranianos que se hallan cercados en la planta metalúrgica Azovstal para evacuar a sus heridos, para lo cual se estableció un alto al fuego y se abrió un corredor humanitario.
El mensaje desde Kiev
Una situación sobre la que se ha pronunciado el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, a través de su cuenta de Telegram: "Gracias a las acciones de los militares ucranianos de las Fuerzas Armadas de Ucrania, de la Inteligencia, así como el grupo de negociación, el Comité Internacional de la Cruz Roja y la ONU, tenemos la esperanza de que se puedan salvar las vidas de nuestros chicos. Quiero subrayar: Ucrania necesita a los héroes ucranianos vivos. Es nuestro principio. Creo que cada persona adecuada entenderá estas palabras".
En tanto, la vice primera ministra de Ucrania Irina Vereschuk, lanzó un mensaje en un tono similar: "En aras de preservar las vidas", 52 militares ucranianos heridos graves fueron evacuados de Azovstal. "Después de estabilizarlos, los intercambiaremos por prisioneros militares rusos".
Al respecto, el analista internacional Eduardo Luque, apuntó que esta rendición es "un golpe moral para el Ejército ucraniano. Veremos pronto también manifestaciones claras de desorden en sus filas, y de un abatimiento moral, puesto que sólo la propaganda mantenía la situación de lucha", concluye.