"La gente ha sufrido un trauma y lesiones reales, y esto ha dañado de manera dramática nuestra moral, preparación, capacidad de contratar nuevos miembros en el servicio exterior", afirmó citado por el periódico The Guardian.
Según Rubin, cuya asociación reúne a unos 17.000 diplomáticos retirados y en activo y trabajadores de ayuda extranjeros, cada vez es más difícil encontrar jóvenes estadounidenses que quieran trabajar en el extranjero debido a su preocupación de que el Gobierno no se haga cargo de ellos en caso de que enfermen.
Los diplomáticos estadounidenses fueron diagnosticados por primera vez con el síndrome de La Habana en Cuba en 2016 y luego en China en 2018.
Dijeron que experimentaron sonidos penetrantes que habían causado efectos en la salud a largo plazo.
13 de enero 2022, 18:51 GMT
Diplomáticos estadounidenses en Rusia, Tayikistán, Austria y en varios países africanos también informaron haber experimentado síntomas del síndrome de La Habana, que incluyen náuseas y mareos.
El pasado 13 de enero, The Wall Street Journal informó que los diplomáticos que trabajan en las legaciones de EEUU en Ginebra y París pueden haber sido afectados por el síndrome de La Habana en el verano de 2021. Al menos un diplomático fue evacuado a EEUU para recibir tratamiento.
El 2 de febrero, un panel de expertos de la comunidad de inteligencia de EEUU publicó su informe sobre el síndrome, que concluyó que los casos podrían explicarse plausiblemente por estímulos externos como la energía electromagnética pulsada.