"Una reducción en el suministro de gas de Rusia a Europa sería difícil de compensar", explicó la empresa en un informe.
En el reporte se indica que a pesar de que el reciente aumento del flujo de gas natural licuado (GNL) a Europa, combinado con el clima cálido en ese continente y Asia, podría ayudar a paliar la persistente reducción de las exportaciones de gas de Rusia en las próximas semanas, la cantidad de producción de gas ruso es demasiado significativa para reemplazar sin afectar los mercados mundiales de este combustible.
Asimismo, sostiene que no se prevé que Rusia imponga una restricción a la exportación del suministro de gas a Europa por los beneficios redituables que obtiene de ellas, las cuales no puede redireccionar de sus principales centros de producción a otros mercados.
Por otra parte, la consultora predice que el suministro de gas continuará fluyendo desde Rusia a Europa en la mayoría de los escenarios en el contexto de las tensiones entre Moscú y los países occidentales.
Estados Unidos y sus socios europeos han reforzado las sanciones dirigidas a los suministros de energía de Rusia por la situación en Ucrania.