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Un pariente por afinidad de Nazarbáev, cesado como jefe de la Comisión Electoral de Kazajistán

NURSULTÁN (Sputnik) — El presidente de Kazajistán, Kasim-Yomart Tokaev, cesó en el cargo al titular de la Comisión Electoral Central (CEC), Berik Imáshev, pariente por afinidad del exmandatario kazajo Nursultán Nazarbáev.
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Un decreto publicado en la página web de la Presidencia kazaja declara a Imáshev "liberado de sus funciones", sin más detalles.
Otra orden ejecutiva nombra presidente de la autoridad electoral al hasta hoy senador Nurlán Abdírov.
La hija única de Berik Imáshev, Aida, está casada con Nuralí Alíev, uno de los nietos de Nazarbáev que gobernó Kazajistán de 1990 a 2019.
El pasado 17 de enero, Tokaev destituyó a uno de los sobrinos de Nazarbáev, Samat Abish, hasta entonces subjefe primero del Comité de Seguridad Nacional.
La situación en Kazajistán se desestabilizó el 2 de enero, con el estallido de protestas por el alza de los precios del gas licuado de petróleo, que más tarde derivaron en disturbios masivos, saqueos y ataques armados contra establecimientos públicos.
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El 5 de enero, Tokaev aceptó la dimisión del Gobierno, asumió la jefatura del Consejo de Seguridad Nacional –cargo reservado antes con carácter vitalicio al expresidente Nazarbáev–, caracterizó la situación como un intento de socavar la integridad del Estado kazajo y pidió ayuda a la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) "para eliminar la amenaza terrorista".
La OTSC respondió de inmediato a su solicitud y el primer contingente llegó el 6 de enero.
La Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC)

La Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) es una alianza militar que se rige por el Tratado de Taskent de 1992 y que entró en vigor en 1994. La estructura constituye un sistema de defensa colectiva integrado por Armenia, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán, Rusia y Tayikistán, y un contingente combinado de fuerzas pacificadoras de 3.600 tropas.

La carta de la OTSC reafirma la abstención del uso o la amenaza de la fuerza para resolver conflictos mutuos, así como la obligación de socorrer a los aliados contra agresiones en caso de que sea invocado por uno de los estados miembros.

El 13 de enero, la OTSC dio por concluida su misión de paz en Kazajistán y procedió a una retirada gradual, señalando que, según el Ministerio de Defensa kazajo, se completó para el día 19.
La violencia en Kazajistán se saldó con 225 muertos y más de 4.350 heridos, según la Fiscalía General. Miles de personas fueron detenidas en relación con los disturbios.
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