"Las perspectivas también se han debilitado en Brasil, donde la lucha contra la inflación impulsó un fuerte ajuste monetario, que pesará en la demanda. Una dinámica similar opera en México, aunque en menor medida", dijo el FMI en su informe Perspectivas Económicas Mundiales (WEO).
El FMI reportó que Brasil tendrá una variación positiva del Producto Interno Bruto (PIB) de 0,3% este año, lo que significa un descenso de 1,2 puntos porcentuales frente a la estimación de octubre.
Para 2023, Brasil tendrá un crecimiento de 1,6%, lo que también supone un ritmo más lento de lo previsto anteriormente.
En tanto, la economía latinoamericana crecerá en 2022 un 2,4%, lo que implica una rebaja en seis décimas de su estimación de octubre ante las menores expectativas de expansión en sus principales economías, Brasil y México.
El informe explica que la economía mundial entra en 2022 desde una posición más débil de lo que se esperaba inicialmente ya que, debido a la variante ómicron del coronavirus los países restablecen las restricciones a los desplazamientos, y crecerá un 4,4%.
Para 2023, según el pronóstico de la institución financiera, el PIB mundial crecerá 3,8%.