"Según nuestra información, la familia del presidente Roch Kabore abandonó Burkina Faso", tuiteó.
En otro tuit se informa que los militares amotinados exigen dimisión de Kabore quien, por su parte, se encuentra protegido en la Gendarmería.
A su vez el medio The Africa Elects comunicó que la noche del domingo al lunes se escuchó "un fuerte tiroteo" cerca de la residencia presidencial.
El domingo varios medios burkineses e internacionales reportaron intensos disparos en varias bases militares de Burkina Faso.
El Gobierno reconoció que hubo disparos, pero a la vez rechazó los rumores sobre un golpe militar y aseguró que la situación estaba bajo control.
La Comisión de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao), en una declaración hecha pública el 23 de enero, expresó "gran preocupación" por la escalada de tensión en Burkina Faso.
"La Cedeao llama a la calma y expresa su solidaridad con el presidente Roch Marc Christian Kaboré, el gobierno y el pueblo de Burkina Faso. La Comisión de la Cedeao pide a los militares que mantengan una postura democrática y prioricen el diálogo con las autoridades", dice el comunicado.