"La finalidad de las autoridades es brindar atención sin discriminación alguna, con un enfoque humanitario, apegado al respeto a los derechos humanos y demás leyes internacionales que regulan la materia", reportó la gubernamental Agencia Guatemalteca de Noticias (AGN).
Según la nota, la PNC controla los puntos estratégicos en las rutas de desplazamiento y albergues transitorios del país, con atención prioritaria para la niñez migrante no acompañada, así como grupos vulnerables.
Este pronunciamiento llega unas horas después de que el presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, propusiera aumentar de 10 a 30 años las penas de prisión para los coyotes, como llaman a los traficantes de personas que medran con la migración irregular.
Las autoridades de Guatemala disolvieron el pasado fin de semana una caravana de migrantes que partió de la norteña ciudad hondureña de San Pedro Sula, con el propósito de llegar a México y seguir paso hacia Estados Unidos.
Según reportes de prensa, en dicha caravana había hondureños, venezolanos, nicaragüenses, haitianos e incluso personas procedentes de África, y algunos de los migrantes se enfrentaron a las fuerzas fronterizas, sin lograr su propósito de ingresar en Guatemala.
Las autoridades guatemaltecas reportaron que siete agentes de la PNC y el Ejército salieron lesionados por diferentes objetos lanzados por los caravanistas.