Las imágenes del incidente muestran cómo el sacerdote escupe en la palma de su mano y se le acerca al hombre. De repente, comienza a frotar la saliva en su cara ante la sorpresa de todos los presentes.
"Recibir una visión de Dios podría ser desagradable", expresa Todd.
Las polémicas imágenes rápidamente se hicieron virales. Los usuarios de las redes criticaron al sacerdote por violar normas sanitarias en medio de la pandemia.
"No le dio su ADN, probablemente le diera el COVID" y "llamo a la Policía", comentaron algunos de los internautas.
Esta no es la primera vez que el excéntrico pastor se convierte en el centro de atención. En marzo de 2020, llevó a cabo un sermón masivo a nivel de estado con el que intentó frenar la pandemia.