"Permítanme que lo deje claro: las fuerzas armadas de Corea del Sur poseen capacidades no solo para detectar este proyectil sino también para interceptarlo", declaró el portavoz de Defensa, Boo Seung-chan, en una conferencia de prensa celebrada el 11 de enero.
Según Boo, los militares surcoreanos han "ido fortaleciendo continuamente" las capacidades de respuesta.
Corea del Norte realizó el 11 de enero el lanzamiento de un presunto misil balístico sobre el mar de Japón que llevó a las autoridades de aviación estadounidenses a suspender temporalmente los vuelos en la costa oeste del país.
La agencia de noticias norcoreana KCNA publicó al día siguiente que fue un misil hipersónico. Según el diario Rodong, la ojiva planeadora del misil remontó su trayectoria tras recorrer 600 km y "ejecutó una maniobra de giro brusco de 240 km" antes de golpear el blanco designado en el mar a una distancia de 1.000 km.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur estimó en un principio que el proyectil recorrió más de 700 km, se elevó a una altitud máxima de 60 km y alcanzó la velocidad Mach 10 en una de las etapas del vuelo.
"Esperamos que no haya malentendidos. No queríamos decir que hubiera volado a Mach 10 durante el vuelo libre", aclaró el 13 de enero el portavoz del Ministerio de Defensa surcoreano.
Según los medios norcoreanos, la prueba del 11 de enero fue presenciada por el dirigente de la nación, Kim Jong-un.
Fue el segundo ensayo de armas realizado por Corea del Norte en lo que va de este mes. El pasado 5 de enero, el país realizó una prueba de misil supersónico que, según la Guardia Costera japonesa, cayó fuera de la zona económica exclusiva de Japón.
13 de enero 2022, 02:32 GMT