La entidad publicó los resultados del concurso en la red social Twitter.
El jeroglífico que también significa 'dinero' consiguió la mayor cantidad de votos. Al final del año cualquier japonés puede enviar su variante candidata a la Asociación y la que logra el mayor número de apoyos se convierte en el símbolo del año saliente.
El símbolo ganador se mantiene en secreto hasta el momento de la publicación. Para evitar filtraciones se limita el número de personas con acceso a esa información.
Este año el jeroglífico fue dibujado por un monje budista del templo de Kiyomizu, uno de los más famosos del país, en un papel artesanal de 1,5 por 1,3 metros.