"Estamos comprometidos a apoyar a Honduras para que desarrolle su democracia. Elecciones creíbles que sean aceptables para su pueblo son la clave para lograr nuestra visión compartida de un país próspero y estable", declaró el embajador británico en este país, Nick Whittingham.
Según un comunicado de la Embajada británica en Guatemala y Honduras, funcionarios de la Oficina de Relaciones Exteriores, Mancomunidad y Desarrollo del Reino Unido se desplegarán en varios distritos para observar las elecciones presidenciales y parlamentarias.
"Los observadores juegan un papel central en aumentar la confianza de los votantes, disuadir el fraude electoral y observar la credibilidad de una elección", acotó Whittingham, quien lidera esta misión.
El Consejo Nacional Electoral de Honduras (CNE) confirmó la acreditación de unos 7.000 observadores, de ellos 400 internacionales, que vigilarán aspectos como campaña, cobertura de medios, proceso de votación y escrutinio, y anuncio de los resultados.
Entre los observadores extranjeros destacan sendas misiones de la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (MOE-UE), que el pasado 26 de noviembre se reunieron para colegiar detalles de su trabajo de cara a los comicios.
La delegación europea está encabezada por la eurodiputada croata Zeljana Zovko y consta de 70 observadores, mientras al frente de los 91 integrantes de la misión de la OEA vino el expresidente costarricense Luis Guillermo Solís.
Cerca de 5,5 millones de personas están llamadas en Honduras a votar el 28 de noviembre para elegir al presidente de la República, tres vicepresidentes, 128 diputados al Congreso Nacional, 20 al Parlamento Centroamericano (Parlacen) y 298 alcaldes.