El resultado concede amplia ventaja al actual presidente, Daniel Ortega, y representa el 49,25% de las 13.459 JRV en los comicios generales celebrados el 8 de noviembre, en los cuales participaron un total de 64,34%, de los más de cuatro millones previstos en el padrón electoral.
De acuerdo con la magistrada Brenda Rocha, presidenta del CSE, restan por revisión 6.830 JRV, un 50,75% del total, para los máximos cargos de la nación centroamericana, presidente y vicemandatario, e informarán el cómputo de los diputados a las 13:00 (hora local) del 8 de noviembre.
La maestra Silvia León manifestó, en declaraciones a Sputnik, que los resultados de los comicios favorecerán la continuidad de proyectos sociales impulsados y creados durante 14 años de gestión del FSLN y la consolidación de un Gobierno de reconciliación, paz y unidad.
Por su parte, Marta Blanco, de la comunidad indígena Sutiaba, significó que Nicaragua representa un país de esperanzas gracias a los planes estatales, entre ellos la actual campaña de vacunación contra la COVID-19, con las formulaciones Pfizer, AstraZeneca, Abdala, Soberana y Soberana 2.
También, aludió a la restitución de los derechos constitucionales de salud y educación, universales y gratuitas, y el impulso de la red hospitalaria más grandes de Centroamérica con la edificación, ampliación y renovación de 70 hospitales, 1.259 puestos médicos, 192 centros sanitarios y 178 casas maternas.
Para Nancy Gutiérrez, docente del departamento de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (Unan-León), luego del proceso legal y limpio experimentado por los ciudadanos el 8 de noviembre, resta el progreso económico del país, cuyo Producto Interno Bruto (PIB) prevé un crecimiento de 7%.
En estos comicios, Daniel Ortega, representante del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), buscó su quinto mandato, el cuarto consecutivo —desde su victoria en 2006— y el segundo junto a su esposa, la vicemandataria Rosario Murillo, frente a cinco formulaciones opositoras, entre ellas, el Partido Liberal Constitucional (PLC), consolidada como la segunda fuerza política.