Internacional

Afganistán se asoma a la amenaza de un nuevo conflicto político

MOSCÚ (Sputnik) — Cuando el talibán, organización terrorista proscrita en Rusia, tomó el poder en agosto pasado, proclamó el fin de la guerra en el país y prometió tiempos de paz, que no solo siguen estando lejos sino que además ahora aparecen las primeras señales de un nuevo conflicto.
Lea en Sputnik
La información que tenemos sobre lo que está pasando dentro del país es escasa: el 13 de septiembre la cadena local Tolo News comunicó, citando organizaciones que apoyan a los medios libres en Afganistán, que un mes después de que los talibanes tomaran el poder más de 150 medios de comunicación cesaron sus actividades en 20 provincias afganas por problemas económicos y otras restricciones introducidas en su contra.
Aún así, podemos seguir la evolución de la situación en ese país centroasiático basándonos en la información que recibimos de los talibanes y fuentes locales que hablan desde el anonimato. Según estas, el foco del nuevo conflicto se podría localizar en el este de Afganistán.
El movimiento talibán

Los talibanes (estudiantes), autodenominado Emirato Islámico de Afganistán, es un movimiento fundamentalista islámico con una fuerte ala paramilitar. Se fundó en 1994 por yihadistas que lucharon contra la República Democrática de Afganistán y el contingente soviético que lo apoyaba.

Dominó el país desde 1996 tras ganar la guerra civil. Refugió a Osama bin Laden y fue derrocado durante la invasión de EEUU tras el 11S, pero recuperó el poder con la retirada estadounidense en 2021.

Es considerado un grupo terrorista por el Consejo de Seguridad de la ONU y está prohibido en Rusia, Turquía y Canadá.

Explosiones en Nangarhar

Desde hace dos semanas se han dado a conocer informaciones –casi todas no confirmadas o silenciadas por lo que son hoy en día las autoridades oficiales de Afganistán– de varios ataques terroristas dirigidos contra los talibanes.
Así, los 18 y 19 de septiembre se produjeron dos explosiones en la ciudad de Jalalabad, en la provincia de Nangarhar, en el este del país centroasiático, causando la muerte de seis personas y dejando herido a al menos un miembro del movimiento talibán. Esos ataques fueron atribuidos por el grupo terrorista ISIS (proscrito en Rusia), que tiene en Afganistán su rama local ISIS-K.
El grupo terrorista Estado Islámico

Estado Islámico (también ISIS, ISIL) es un grupo paramilitar fundamentalista. Basa su ideología en el wahabismo, una corriente islámica que destaca por su rigor en la ley sharia y expansionismo.

Surgido como una rama del grupo terrorista Al Qaeda, rápidamente se independizó y logró ocupar gran parte de Irak y Siria. En el 2014, su líder Abu Bakr al Bagdadi proclamó el califato. Perdió los territorios ocupados gracias a los esfuerzos militares de Rusia y EEUU.

Es considerado un grupo terrorista y su actividad está prohibida en países como Siria, Irak, Rusia y EEUU, entre otros.

Los talibanes informaron de la detención de 40 personas en relación con esos ataques, pero no se ha informado de momento si habrá alguna investigación o si serán sometidas a juicio.
El 22 de septiembre, se supo que tres explosiones en Jalalabad se saldaron con tres muertos (un civil y dos talibanes), y el día 23 habitantes locales comunicaron a Sputnik que cinco talibanes fallecieron en ataques separados de unos hombres armados en la provincia de Nangarhar.
El sábado, 25 de septiembre, se produjo la explosión de una bomba supuestamente colocada en un vehículo de los talibanes. El ataque, según informó a Sputnik una fuente local, provocó dos muertos y seis heridos, entre ellos miembros del movimiento.
Internacional
¿Pueden darse por terminadas las guerras tras la retirada de EEUU en Afganistán?
Los autores de esos ataques no han sido identificados todavía.

Resistencia, talibanes, Al Qaeda

Podría ser que se trata de la obra de la resistencia antitalibán, pues tras su derrota en la provincia de Panshir se transformó en una guerrilla y aseguraba que seguiría luchando contra el nuevo Gobierno.
Sin embargo, las fuerzas de resistencia se concentran en el norte del país, y no está claro si pudieron trasladar a sus militantes a otra parte de Afganistán.
Como apunta en una conversación con Sputnik Alejandro Gabriel Cassaglia, coordinador regional de la Comunidad de Inteligencia y Seguridad Global (Ciseg) para América Latina y el Caribe, la resistencia antitalibán en Panshir, denominada Alianza del Norte, tiene pocas posibilidades de ganar en su lucha contra los talibanes.
"Las posibilidades de éxito de (...) la Alianza del Norte, creo que se circunscriben a la ayuda que puedan recibir de Occidente a través de empresas de seguridad privadas (mercenarios), pero lo veo muy difícil. De todos modos habrá que estar atentos a la evolución del conflicto, que puede beneficiar a esta resistencia, si las distintas tribus del talibán comienzan a guerrear entre ellas, ya que su lealtad es de clanes, y no en la misma medida con el actual Gobierno", señala.
Bajo la bandera del autodenominado Emirato Islámico de Afganistán los talibanes reunieron en sus filas a representantes de numerosas tribus, pero ahora, cuando los dirigentes del movimiento han asumido el poder, ya no tienen a un enemigo común para mantenerse unidos en su contra.
Internacional
Un experto: EEUU tratará de recuperar su prestigio internacional dañado tras retirada de Afganistán
El jueves, 23 de septiembre, el ministro de Defensa afgano en funciones, Mohammad Yakub, llamó a los talibanes a evitar la violencia contra la población.
"Si se mata a alguien ahora, esta no es la política del Emirato Islámico no se puede matar a la gente, esto está muy mal (...) si alguien continúa cometiendo tales violaciones, lo arrestaremos y actuaremos de acuerdo con la ley sharía", dijo ante los fundamentalistas.
Un ministro de Defensa necesita pedir a sus combatientes que dejen de perpetrar asesinatos. Algunos pueden suponer que lo pidió tras varios casos de desobediencia y homicidios por parte de los talibanes.
Por otro lado, Cassaglia indica la presencia de otra fuerza en el país, Al Qaeda (organización terrorista proscrita en Rusia).
La organización terrorista Al Qaeda

Al Qaeda (la base) es una organización terrorista de naturaleza salafista, una rama ultraconservadora del islam. Se fundó en 1988 por el multimillonario saudí Osama bin Laden y veteranos yihadistas que, con apoyo de EEUU, habían luchado contra la República Democrática de Afganistán y el contingente soviético que la apoyaba.

Su estructura se basa en una red de células clandestinas dispersas por el mundo. Entre sus atentados más sonados están los ataques del 11-S y del 11-M en Madrid.

Es considerado un grupo terrorista y su actividad está prohibida en países como España, EEUU y Rusia, entre otros.

"Al Qaeda tendrá [en Afganistán] un santuario donde refugiarse y entrenarse. Recientemente se conoció un vídeo de su líder, Aymán Zawahiri, que renovaba sus objetivos de atacar a Occidente, encabezado por Estados Unidos y sus principales aliados. Estos mensajes radicalizantes, a modo de arenga, y con la propia convicción de haber derrotado al ejército norteamericano [aunque esto no sea tan así], les ha dado una 'inyección de energía' a su ideología yihadista", constata.
Esos mensajes de Al Qaeda entran en contradicción directa con la postura oficial del Gobierno talibán, que el viernes pasado, 24 de septiembre, declaró que se esfuerza para que su embajador sea aceptado en la ONU para que pueda "fortalecer las relaciones con la Unión Europea, Estados Unidos y otros países".

En el ojo del huracán geopolítico

Con toda esta inestabilidad interna, parece que Afganistán está en la mira de China y Rusia, dispuestas a competir entre sí para apadrinar al Gobierno talibán. Ambos países están en contacto directo con los talibanes y son unos de los pocos que mantienen sus embajadas en Kabul tras la huida de la anterior administración.
Qué pasa
EEUU se va de Afganistán: ¿va a por Rusia y China?
Según Cassaglia, el principal interés de China es geopolítico.
"La expansión de China en Asia es importante para extender su influencia en el continente. Teniendo en cuenta que Afganistán no se encuentra en Medio Oriente, sino en Asia Central", apuntó.
Otro interés de China, continuó el experto, es el económico.
"Afganistán posee importantes reservas de petróleo [se estima entre 500 y 2.000 millones de barriles de crudo]. También posee importantes reservas de gas y carbón. A ello hay que sumarle los recursos mineros. Posee esmeraldas, lapislázulis, metales preciosos como oro y plata, además de cobre, berilio, cromo y zinc. También posee uranio. Y además tiene litio, tan importante para la industria de la telefonía china, ya que se usa para la fabricación de baterías para celulares", señaló.
Internacional
Desde China sugieren que la experiencia afgana sea una lección de humildad para EEUU
El especialista de la Ciseg recordó que China ya tiene presencia en este sector de Afganistán mediante su empresa China Metallurgical Group Corporation.
"El Gobierno Chino sabe que brindándole apoyo político y económico al flamante Gobierno talibán, se asegura recuperar su apoyo a través de la explotación de sus recursos", resumió.
Los intereses de Rusia, considera Cassaglia, serían los mismos, "y por supuesto disputarle el protagonismo a China en estos campos", añadió.
Internacional
"Tras sufrir un fracaso completo, Occidente ha perdido voz y voto en Afganistán"
Discutir