"Fiscalía de Ecuador y Policía ejecutaron -esta madrugada- ocho allanamientos en Quito (norte) y Guayaquil (oeste) en el marco de una investigación por presunta concusión (exacción hecha por un funcionario en provecho propio) relacionada a la asambleísta Bella Jiménez", dijo la Fiscalía.
Hasta la oficina de la legisladora, ubicada en la sede de la Asamblea, en el centro de Quito, llegaron policías y agentes investigadores de la Fiscalía que acordonaron los exteriores de la edificación mientras en el interior se desarrollaba el operativo de forma reservada.
El pasado 23 de agosto, la coalición Unión por la Esperanza (UNES), liderada por el expresidente Rafael Correa (2007-2017) presentó en la Fiscalía una denuncia en contra de Jiménez luego de que una de sus asambleístas, Victoria Desintonio, presentó documentos que indicarían una transferencia de 6.000 dólares a la cuenta de un hermano de la vicepresidenta, a cambio de un cargo en su despacho.
Otra denuncia contra Jiménez la hizo el titular de la Mesa de Fiscalización de la Asamblea, Fernando Villavicencio, después de las publicaciones de dos portales digitales sobre una supuesta gestión de cargos públicos por parte de Jiménez.
En ellos se muestran supuestos depósitos bancarios, audios, chats y mensajes en WhatsApp en los que, presuntamente, la funcionaria gestiona cargos públicos.
Tras estas revelaciones, Jiménez fue expulsada de su partido Izquierda Democrática (centro).
Al momento hay dos investigaciones impulsadas por el Comité de Ética de la Asamblea y por el Consejo de Administración la Legislatura, que podrían derivar en la destitución de la legisladora.
La semana pasada Jiménez rompió el silencio y calificó como mentiras las informaciones y denuncias que pesan sobre ella.
Jiménez niega las acusaciones.