El representante presidencial especial de Rusia para Afganistán, Zamir Kabulov, había pidido a las Naciones Unidas que sus funcionarios volvieran al país, que fueron evacuados para abordar la posible salida de refugiados afganos a otras naciones.
"La ONU ajustará nuestro impacto en función de nuestras necesidades operativas, así como de la situación de seguridad", dijo Dujarric.