El último avión aterrizó en la base aérea de Zaragoza. Atrás quedan días de incertidumbre y nervios a caballo entre Dubái y Kabul. El objetivo era evacuar a la delegación española en Afganistán y al mayor número de colaboradores locales y sus familiares del país asiático. La misión ha concluido con más de 2.200 personas aterrizadas en España. Una cifra que no engloba al total de interpretes o guías que cooperaron con el Ejército u organizaciones humanitarias. Ellos seguirán al amparo del régimen talibán. Los vuelos finales eran para aquellos militares que estiraron su presencia en Oriente Medio.
El movimiento Talibán
Los talibanes (estudiantes), autodenominado Emirato Islámico de Afganistán, es un movimiento fundamentalista islámico con una fuerte ala paramilitar. Se fundó en 1994 por yihadistas que lucharon contra la República Democrática de Afganistán y el contingente soviético que lo apoyaba.
Dominó el país desde 1996 tras ganar la guerra civil. Refugió a Osama bin Laden y fue derrocado durante la invasión de EEUU tras el 11S, pero recuperó el poder con la retirada estadounidense en 2021.
Es considerado un grupo terrorista por el Consejo de Seguridad de la ONU y está prohibido en Rusia, Turquía y Canadá.