Puta es, según palabras de la artista, un "vómito" contenido durante mucho tiempo. Las canciones del disco son un relato autobiográfico jamás contado que Zahara escribió durante el confinamiento y tras un año de terapia psicológica. Su historia es la de una niña que sufrió abuso sexual cuando tenía 12 años, a la que hacían bullying en el colegio y a la que llamaban 'Merichane' a sus espaldas porque ese era el nombre de la puta del pueblo.
Merichane fue precisamente el primer single de este trabajo único lleno de lisergia y emocionalidad, y que desde luego no está dejando indiferente a nadie. "El disco es un desnudo integral. Esto es lo que me ha pasado y esto es lo que soy. No sirve de nada huir hacia adelante", cuenta la artista en su entrevista con Sin tapujos. Zahara habla también de los trastornos alimenticios que tuvo a raíz de toda su experiencia y de cómo se lo ocultó a su familia porque "no quería decepcionarles".
Ahora, a sus 37 años, la cantante triunfa con Puta, que se está convirtiendo en un grito explícito y reivindicativo de sororidad, "de lo que a todas las mujeres nos han llamado alguna vez; y el feedback está siendo increíble".