"Por ahora no hay pronunciamientos de manera colectiva de la oposición, pero entiendo que las fuerzas vivas de la nación deben ponerse de acuerdo para hacer una propuesta nacional sobre cómo manejar la crisis", comentó el también fundador-director ejecutivo de la Fundación Zile, que trabaja para reforzar los lazos entre la República Dominicana y Haití.
Paraison, quien fuera cónsul de su país en la vecina República Dominicana, condenó el magnicidio, y llamó a que los culpables sean castigados severamente.
Asimismo, destacó que tras el asesinato, "no se han visto movilizaciones populares".
"El pueblo se ha quedado recogido, además que el Gobierno decretó un estado de sitio por 15 días, lo cual impedirá el libre tránsito", subrayó Paraison.
Según el ex cónsul de Haití en República Dominicana, "existen elementos políticos dentro del país que, en vez de ayudar a alcanzar un ambiente de conciliación, han creado situaciones que han generado malestar, pero no creo que dentro de la oposición política en Haití haya personas que pudieran preparar un plan para matar al presidente Moise".