"Según el proyecto de ley, el Estado podrá utilizar en la construcción del nuevo reactor de la central de Dukovany solo tecnologías de aquellos países que se han adherido al acuerdo internacional sobre contratación pública y entre los que no se encuentran Rusia ni China", indicó el medio.
La nota agrega que el Legislativo checo también aprobó una encuesta de seguridad que se enviará a las empresas que participen en la licitación para las obras del nuevo reactor nuclear.
El borrador, que fue presentado por el Gobierno del país, ahora deberá ser aprobado por la Cámara Alta.
La víspera, el ministro de Industria, Karel Havlicek, recordó que el Gobierno checo ya había dejado a las compañías rusas y chinas al margen de la licitación.
En 2018, la rusa Rosatom, la estadounidense Westinghouse, la china China General Nuclear Power, la francesa EDF, la surcoreana KHNP y la alianza franco-japonesa Areva y Mitsubishi Atmea se presentaron a la licitación convocada para construir un reactor en la centra nuclear de Dukovany, edificada con tecnologías soviéticas entre 1985 y 1987.
El ganador de la licitación debería anunciarse a más tardar en 2024. La construcción debería comenzar en 2029 y completarse en 2036. El costo del proyecto es de unos 6.000 millones de euros.
La posible participación de empresas rusas y chinas ha sido criticada repetidamente por los partidos de oposición, así como por la contrainteligencia checa. En octubre pasado, más de 30 parlamentarios checos pidieron al Gobierno que no permitiera que las compañías de Rusia y China licitaran por la nueva unidad de la central nuclear por razones de seguridad.
En marzo, el Ejecutivo del país centroeuropeo excluyó a la empresa china de los posibles postores. Un mes más tarde, la rusa Rosatom corrió la misma suerte, después de que Praga acusara a los servicios secretos rusos de implicación en las explosiones que causaron dos muertos en el depósito de municiones en Vrbetice, en la región de Zlin, en 2014.