El Plan elaborado por el Gobierno de Mario Draghi constituye un paso imprescindible para acceder a los 210.000 millones de euros que la UE asignó a Italia en forma de subsidios y empréstitos para superar el impacto económico de la pandemia del coronavirus.
Tras el voto en el Parlamento el documento deberá ser confirmado definitivamente por el Consejo de Ministros y enviado a Bruselas el próximo viernes 30 de abril.
En los próximos meses el Gobierno tendrá que preparar una serie de decretos a fin de facilitar la realización del Plan.
El documento prevé reformas en esferas como la asignación de contratos públicos, la administración pública, la imposición fiscal, la justicia, la lucha contra la corrupción, entre otras.
Si el 1 de agosto la Comisión Europea aprueba el documento, Italia podrá recibir ya en septiembre la primera parte de las ayudas, equivalente a 20.000-25.000 millones de euros.
Según las estimaciones del Gobierno, la realización del Plan permitirá aumentar el PIB en un 3,6% para 2026.