Blinken repudió "el uso de campañas de desinformación y corrupción armada para alimentar la desconfianza en nuestras democracias, y ciberataques que tienen como objetivo nuestra infraestructura crítica y roban propiedad intelectual, desde la flagrante coerción económica de China sobre Australia hasta el uso de desinformación de Rusia para erosionar la confianza en las elecciones y en vacunas seguras y eficaces".