Son las primeras penalizaciones que el Gobierno conservador de Boris Johnson ha decretado contra individuos sirios desde la consumación del Brexit, en enero de 2021.
Cargos y asesores políticos, militares y empresarios sirios se incluyen en la lista de sancionados, cuya publicación coincide con el décimo aniversario de las protestas que desembocaron en la devastadora guerra civil.
Entre los sancionados se encuentran el ministro de Asuntos Exteriores, Faisal Mekdad, el asesor de Asad, Luna Shibl, el financiero Yassar Ibrahim, el empresario Muhamad Bara Al-Qatirji, el comandante de la Guardia Republicana, Malik Aliaa, y el comandante del Ejército, Zaid Salá.
El canciller británico adelantó que los identificados tendrán sus activos congelados y no podrán entrar en Reino Unido para "asegurar que no puedan beneficiarse" del país de "ninguna forma".
Se estima que más de medio millón de personas han muerto a consecuencia del conflicto y unos once millones de individuos han perdido sus hogares en la última década en Siria.
Este marzo se cumplen 10 años del conflicto sirio, en el que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas.
La solución del conflicto se busca en dos plataformas, la de Ginebra, bajo los auspicios de la ONU, y la de Astaná, copatrocinada por Rusia, Turquía e Irán.