Según el funcionario, los designados, Ali Hemmatian y Masoud Safdari, estuvieron involucrados en "flagrantes violaciones a los derechos humanos, concretamente torturas y tratos y castigos crueles, inhumanos y/o degradantes" contra prisioneros políticos y personas detenidas durante las protestas registradas en 2019 y 2020 en Irán.
Blinken añadió que EEUU continuará analizando una variedad de herramientas que pueden ser usadas para que Irán rinda cuentas por cualquier violación a los derechos humanos.
Washington expresó sus preocupaciones sobre Irán durante una sesión del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra, dijo el secretario de Estado.