"[Es] el único instrumento que puede garantizar tanto una solución práctica y satisfactoria sobre este contencioso, como la superación de las diferencias con la hermana República Cooperativa de Guyana", señala el comunicado difundido por el canciller Jorge Arreaza.
El Gobierno de Nicolás Maduro llamó a Guyana para que desista en la incorporación de terceros actores en la controversia territorial, pues aseguró que sus intereses geopolíticos y geoeconómicos perturban las relaciones bilaterales y amenazan la paz regional.
5 de febrero 2021, 12:59 GMT
"Venezuela mantiene su indeclinable lucha porque se concrete la negociación amistosa que conduzca a una verdadera, justa y debida solución pacífica que restablezca la verdad histórica y resarza el injusto daño provocado con la fraudulenta acción consumada por Reino Unido", indica el texto.
En 1966, Venezuela y Guyana firmaron un acuerdo para buscar una solución pacífica a esta disputa, pero Georgetown introdujo en 2018 una demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en la que pide al tribunal validar legalmente el laudo arbitral de 1899 que le da control absoluto sobre el territorio.
La CIJ se declaró competente el pasado 18 de diciembre para juzgar la validez del Laudo Arbitral de 1899, a petición de Georgetown, en el que se estableció la frontera entre Venezuela y Guyana, localizada en la región del Esequibo.
El Gobierno venezolano rechazó el fallo de la Corte, al considerar que la decisión no le corresponde a ese organismo, sino que se debe tomar mediante el diálogo y el Acuerdo de Ginebra de 1966.
Para el próximo 26 de febrero, está previsto que la Corte Internacional de Justicia realice una videoconferencia sobre el diferendo del Esequibo, una zona que posee grandes reservas de petróleo.