Cuando la mujer se dio cuenta que le faltaba una de sus joyas, empezó a buscar por toda su casa y finalmente la encontró en el último lugar que podía imaginarse.
La joya estaba siendo trasladada por un grupo de hormigas que parecía tener prisa en llevarse la pieza hacia un destino desconocido. La persona que las encontró decidió captar el momento para comprobar lo que estaba pasando porque pocos creerían que unas pequeñas hormigas serían capaces de hacer algo semejante.