"Europa invirtió miles de millones para ayudar a desarrollar las primeras vacunas del mundo contra el COVID-19. (...) Y ahora, las empresas deben cumplir con sus compromisos", dijo la funcionaria en el Foro Económico de Davos.
Previamente Pfizer y BioNTech anunciaron sus planes de modernizar la producción, lo que reducirá temporalmente los suministros de su vacuna que ya está autorizada en la UE.
La empresa sueco-inglesa AstraZeneca, pendiente de la autorización de uso, anunció también una disminución del 60% de los suministros de su vacuna a la UE durante el primer trimestre de este año.
El incumplimiento de los contratos por parte de las farmacéuticas ha puesto en entredicho los planes de inmunización de los Veintisiete.