La firma Glassie ofrece una línea de protectores de pantalla de vidrio templado de tres capas que son los primeros del mundo que pueden personalizarse, o por lo menos así lo afirma la compañía. El dibujo se aplica al vidrio mediante un proceso que la empresa denomina phantom printing (impresión fantasma).
La empresa no comparte los detalles exactos del funcionamiento de phantom printing, pero la idea general es que la luz que se refleja para hacer visibles los patrones infundidos queda completamente anulada cuando se enciende la pantalla del teléfono. De este modo, el dibujo queda invisible.
Los vidrios son adecuados para 11 modelos diferentes de iPhone que se remontan al iPhone X y su precio es de 40 dólares.