"[Irfaan Alí] aludió en repetidas veces a Venezuela en asuntos absolutamente de la incumbencia de nuestra jurisdicción interna, al referirse a un decreto presidencial sobre ordenación administrativa regional que es de la exclusiva competencia del Ejecutivo nacional conforme a la Constitución de la República, y que en nada compete a las autoridades guyanesas", señala el comunicado difundido por el canciller Jorge Arreaza.
Alí rechazó el sábado 9 de enero el decreto del Gobierno venezolano, tras argüir que "viola el derecho internacional" y advirtió a la comunidad mundial del "peligro que supone a la seguridad y la paz".
De acuerdo al texto, las declaraciones de Alí demuestran el proceder de Guyana sobre el territorio Esequibo.
"Estas asombrosas declaraciones además se arrogan derechos aún no resueltos en la controversia territorial, y confirman el grave proceder de Guyana al disponer unilateralmente de un territorio controvertido mediante el otorgamiento de concesiones a emporios energéticos que amenazan la integridad territorial de Venezuela", indica el comunicado.
El Gobierno venezolano manifestó que el quebrantamiento reiterado del Acuerdo de Ginebra de 1966 por parte de Guyana y el otorgamiento unilateral de concesiones en un territorio que no le pertenece, confirman "la grave violación a un tratado internacional válidamente depositado en la ONU".
Venezuela reiteró a Guyana la invitación a reencauzar la controversia sobre el Esequibo en el marco jurídico del Acuerdo de Ginebra.
Maduro aprobó el decreto sobre la fachada atlántica luego que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) se declaró competente para conocer la disputa por el territorio Esequibo que mantienen Venezuela y Guyana.
Las tensiones por el Esequibo comenzaron en 1899, cuando Venezuela fue despojada de su territorio a través del Laudo arbitral de París, donde Reino Unido entregó a Guyana esa parte de la nación caribeña.