"Después de tener conocimiento de la actividad maliciosa, la OCIO [Oficina del Director de Información] eliminó el método identificado por el cual el hacker estaba accediendo al correo electrónico de O365. En este punto, la cantidad de buzones de correo O365 a los que se puede acceder parece estar limitada a alrededor del 3% y no tenemos indicios de que algún sistema clasificado haya sido afectado", dijo Raimondi.
En diciembre, los medios informaron que numerosas entidades y empresas del Gobierno federal habían sido blanco de un ciberataque masivo después de que corrompieron el software SolarWinds y culparon del ataque a un actor extranjero; algunos señalaron instantáneamente a Rusia.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, refutó las acusaciones de que Rusia estaba detrás del ciberataque.