"España podría elaborar una política especial a aplicar a Bielorrusia, apoyar las sanciones europeas y fortalecer la presión sobre el régimen bielorruso. También se debatió la propuesta de abrir una investigación internacional sobre los crímenes de lesa humanidad cometidos en Bielorrusia. La iniciativa podría partir de España", dice el comunicado.
La opositora cumplió una visita a España, durante la cual se reunió con representantes del Parlamento, el Gobierno, la Cancillería, la comunidad pericial española y los bielorrusos residentes en este país.
En, particular, instó a los parlamentarios a crear un grupo de "amigos de Bielorrusia" en el Legislativo español, y les pidió "actuar con mayor audacia, ayudar no solo expresando palabras de apoyo sino con los hechos, plantear más a menudo el tema de la situación en Bielorrusia y prestar apoyo al movimiento femenino y estudiantil, a los médicos y todos los trabajadores bielorrusos que sufren persecuciones a causa de sus criterios políticos".
Según Tijanóvskaya, la Unión Europea podría hacer mucho más en materia de sanciones y presionar más sobre el régimen bielorruso. La opositora dijo que España y la UE deberían asumir la responsabilidad sobre la solución de la situación bielorrusa.
La opositora y el exsecretario general de la OTAN, Xavier Solana, debatieron la posibilidad de organizar unas negociaciones sobre la eliminación de la crisis en Bielorrusia.
Bielorrusia es escenario de protestas desde el pasado 9 de agosto por los resultados de las elecciones presidenciales que revalidaron un nuevo período del actual mandatario, Alexandr Lukashenko.
27 de noviembre 2020, 12:41 GMT
Según el recuento oficial, Lukashenko obtuvo el 80,1% de los votos, seguido de Tijanóvskaya, con el 10,12%.
La oposición bielorrusa denunció numerosas irregularidades electorales y exige una repetición de los comicios, opción que Lukashenko descartó.
En el país estallaron protestas, los servicios de seguridad utilizaron gases lacrimógenos, balas de goma y otros medios para dispersar a los manifestantes, de los que tres fallecieron, según los reportes oficiales.
Tijanóvskaya se fue a Lituania tras los comicios. La Fiscalía de Bielorrusia abrió causa penal contra ella, imputándole llamamientos de tomar el poder, y la declaró en búsqueda y captura; además incoó otras causas penales, calificando la actividad de Tijanóvskaya y de otros opositores como creación de un grupo extremista con el fin de hacerse con el poder por medios anticonstitucionales.