"El 49,3% de los hogares consultados tuvieron una reducción en su ingreso total", informó el órgano estadístico.
En la zona metropolitana más grande del país, donde viven unos 16 millones de habitantes, cuatro de cada diez hogares contaba con al menos un miembro con problemas laborales, ya fuera porque hubiera sido despedido, suspendido, o hubiera visto reducir sus ingresos.
"En los hogares en que reside al menos un niño, niña o adolescente, los problemas laborales alcanzaron el 48,3%", destacó el Indec.
En las casas con menores niveles de instrucción, la merma de ingresos afectó al 57,1%, porcentaje que sube dos décimas porcentuales en los hogares en los que vive algún menor de edad.
En añadido, uno de cada tres hogares (33,8%) reconoció haber reducido al menos algún alimento esencial (carne, verduras o leche) por motivos económicos.
"Entre los hogares de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el porcentaje de quienes debieron reducir el consumo de al menos uno de estos alimentos alcanza al 21,2%, en tanto que para los que residen en el conurbano bonaerense es del 38,0%", afirmó el organismo oficial.
El porcentaje de hogares que redujo el consumo de productos no alimentarios ascendió al 45,8%.
Ayudas
El 26,8% de los hogares situados en la capital o en la zona metropolitana de la provincia de Buenos Aires, por otro lado, tuvo algún miembro que accedió a alguna de las prestaciones lanzadas por el Poder Ejecutivo para contener las consecuencias de la pandemia del COVID-19, además de obtener otra asignación habitual a la que tenía derecho.
En paralelo, el 21,2% de los hogares que no recibían ninguna prestación habitual sí tuvo acceso a alguno de las ayudas contempladas por el Gobierno debido a la pandemia.
Pese a las ayudas, el 28,6% de los hogares debió dejar de pagar o tuvo problemas para cubrir los costos asociados a los servicios de la vivienda.
Por otro lado, el 4,6% de los hogares tuvo algún integrante con dificultades para acceder a la compra de medicamentos que necesitaba, proporción que sube a 8,6% en cuanto a los que tuvieron inconvenientes para ir a una consulta médica.
La encuesta contó con 2.139 respuestas efectivas de hogares que vivían en la misma vivienda donde habían sido encuestados con anterioridad, de acuerdo al Indec.