A las 14.40 GMT, los futuros de Brent con entrega en febrero aumentaron un 2,66%, hasta 50,16 dólares por barril.
A su vez, los contratos del crudo de la marca WTI con entrega en enero crecían un 2,75%, hasta 46,77 dólares por barril.
El pasado 6 de marzo, la OPEP y diez productores independientes (Azerbaiyán, Bahréin, Brunéi, Kazajistán, Malasia, México, Omán, Rusia, Sudán y Sudán del Sur) pusieron fin a su anterior acuerdo sobre los recortes petroleros vigente hasta el 31 de marzo al no lograr consensuar una prórroga de la iniciativa que estaba vigente desde principios de 2017.
La ruptura del pacto petrolero, junto con la pandemia de coronavirus, hundieron el precio del petróleo a mínimos históricos.
El 1 de mayo entró en vigor el nuevo acuerdo de recorte petrolero de la OPEP y los productores independientes, que establece un descenso escalonado del bombeo de 9,7 millones de b/d en mayo y junio, de 7,7 millones en el segundo semestre de 2020 y de 5,8 millones hasta finales de abril de 2022.
A principios de junio, la OPEP+ acordó extender la reducción de la producción de petróleo en 9,7 mb/d hasta finales de julio. Desde agosto el recorte es de 7,7 mb/d.