"La serie original del IPI experimenta una variación anual del menos 6,1%", explica el órgano estadístico en un comunicado.
En tasa mensual, el IPI subió un 0,6% entre septiembre y octubre si se eliminan los efectos estacionales.
Aunque el índice crece en tasa mensual de forma ininterrumpida desde abril, en términos interanuales ya son 10 meses seguidos de descenso, una disparidad que se explica sobre todo por la profundidad de las caídas en los meses de parón económico por la pandemia.
Los mayores descensos del año se registraron tras el primer estado de alarma contra el coronavirus, con caídas del 12,1% en marzo y de hasta el 34% en abril, a lo que siguió otro descenso del 28% en mayo.
Desde entonces, lo más cerca que estuvo el IPI de recuperar tasas positivas fue en septiembre, con una caída limitada 0,6% respecto al mismo mes de 2019, pero ese amago de vuelta a la normalidad se desvaneció con la llegada de octubre y la ralentización económica por la segunda oleada del virus.
Los mayores descensos de octubre se dieron en bienes de consumo (-8,3%) y en bienes de equipo (-9,6%), seguidos por la energía (-3,8%) y los bienes intermedios (-2,8%).